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Internet Explorer es el navegador más recordado del mercado y aún sigue siendo de lo más usados. No es precisamente el más querido ya que la proliferación de competencias más veloces y prácticas han dejado patentes sus defectos, entre los que destaca la lentitud. Eso ha significado en el mundo virtual unas buenas cuotas de humor por medio de memes y otras gráficas. Sin embargo, a pesar de todo eso el navegador de Microsoft sigue formando parte de la actividad de muchos ordenadores hoy en día.
Para todos los internautas que prefieren Internet Explorer o que simplemente están acostumbrados a él, hay que informarles que la compañía Microsoft planea quitarles soporte a partir del 12 de enero, por tanto, quienes no actualicen sus versiones podrían experimentar dificultades de navegación y otros problemas en la PC derivados del mismo. Solo el Interrnet Explorer 11 seguirá operando. Por tal motivo, se exhorta a los usuarios que pasen a reemplazar su IE actual por esa última versión.
A partir del día 12 de enero, quienes aún no se hayan pasado a la versión anteriormente mencionada verán una notificación solicitando que se instale, y si no se obedece, estarán exponiéndose a ciertos problemas al inicio imperceptibles. Asimismo, hay que mencionar que dicha notificación solo será vista en ordenadores que cuenten con el sistema operativo a partir de Windows 7. Es decir, quienes sigan manteniendo el Windows XP ni se enterarán de lo que está pasando, puesto que esa versión de Windows ya lleva un año sin el soporte de Microsoft:
¿Qué significa perder soporte?
No contar con soporte no significa estrictamente ser inhabilitado. En el ámbito de los productos y servicios virtuales, perder soporte significa que la empresa desarrolladora no va a tomar en cuenta a trabajos que considere obsoletos. Quienes quieran seguir usándolos, pueden hacerlo si gustan, pero ya no gozarán de nuevos parches, ni de nuevas actualizaciones instaladas, ni de la protección de la privacidad al momento de navegar. En conclusión, usar productos sin soporte significa estar expuesto a la ciberdelincuencia y a incompatibilidades con otros softwares.
Ese es el caso de Windows XP, que a pesar de ya no recibir soporte de Microsoft sigue siendo usado por miles de usuarios aparentemente sin problema alguno. No obstante, esos usuarios no están contando con una navegación segura ni con la protección de sus datos. Por eso es necesario ya no usar XP ni un Internet Explorer que no sea el 11. En el caso de los que usen Windows 10, lo recomendable es que lo reemplacen por otro navegador de Microsoft llamado Edge, el cual es relativamente nuevo.
Esta es una de las primeras medidas que la compañía está tomando este 2016 con el afán de renovarse de forma constante. No es descabellado asumir que tal vez tiene algunos lanzamientos que irá develando poco a poco conforme transcurra el año, y que por eso piensa dejar en el olvido sellos que innegablemente han sido superados por la competencia desde ya hace mucho tiempo.